Oscar Canales Gonzáles
Sinopse: Al referirnos al tema de la seguridad pública lo conceptualizamos y nos referimos a la falta o ausencia de peligro, daño o riesgo, esta seguridad corresponde ser proporcionada por el Estado en su objetivo de garantizar
la indemnidad de los ciudadanos, así como la de los bienes de estos; en ese sentido los ciudadanos se esperaría que al proporcionarnos la prerrogativa de la seguridad publica podamos desarrollarnos en convivencia armónica dentro del contexto social.
Es deber del Estado proveernos de una seguridad pública efectiva, de manera responsable, aspecto muy contrario a lo que vivimos en el día a día plagado de problemas diversos, entre ellos la inseguridad ciudadana, por la que se torna difícil la convivencia pacífica y se generan entornos de violencia los que se perciben desde los núcleos familiares y que se puede advertir en las calles en sucesos cotidianos como los delitos contra el patrimonio, específicamente robos y asaltos, comercialización de droga al menudeo, el pandillaje juvenil; situaciones que incrementan el temor y la inseguridad de los ciudadanos que esperan de parte del Estado una tutela realmente efectiva.
Todo esto conduce a examinar el sistema de justicia y si bien es cierto son diversos los actores que lo conforman y deben asumir acciones decisivas, la cara visible de esta falta de acción por parte del Estado es la Policía Nacional, a la que la población le atribuye la ineficiencia y en consecuencia la responsabilidad ante la inseguridad que se vive en diversos entornos.
